Cuidar el agua también incluye a tus mascotas
Nuestras mascotas también tienen su propia huella hídrica. Además del agua que necesitan para beber, su alimentación, juguetes y productos para su cuidado consumen agua virtual; es decir, el agua que se utiliza en la producción industrial de cada insumo.
Sabías que...
Elegir alimentos sostenibles y reutilizar recursos en el cuidado de tus mascotas puede reducir significativamente su impacto hídrico. Pequeños cambios diarios mejoran tu huella hídrica y la de tu compañero de cuatro patas.
Datos que impactan
- Un análisis de huella hídrica en la producción de alimento seco para perros en Latinoamérica concluyó que se necesitan aproximadamente 44.953 litros de agua para llegar a producir 1 kg de alimento seco para perro de variedad regular; en el caso de la variedad premium se requieren 48.680 litros y por último, la producción de una variedad artesanal de este alimento requiere solo 10.461 litros (fuente: Concytec).
- La tenencia responsable de un perro pequeño de pelo largo genera una huella hídrica total (consumo directo + consumo indirecto) aproximada de 32.600 litros anuales (fuente: Aivazidou-Tsolakis 2017).
- La huella hídrica de un perro pequeño es significativamente mayor que la de un gato.
Tu acción cuenta:
- Elegí alimentos para mascotas con menor consumo de agua en su producción. Si tu mascota no tiene alergias específicas, opta por alimentos cuya proteína principal no sea carne bovina. Las proteínas como el pollo, pavo o pescado tienen una huella hídrica significativamente menor.
- La tenencia responsable de mascotas y la castración ayudan a disminuir la huella hídrica.
- Tu perro y tu gato no necesitan muchos juguetes. Minimizá la compra de objetos innecesarios que requieren agua para su fabricación.
- Para bañar a tu perro y entre baños húmedos, utiliza alternativas como champú en seco específico para mascotas, toallitas húmedas o simplemente un buen cepillado para eliminar suciedad y pelo muerto.
- Cuando bañes a tu mascota, cerrá la canilla mientras lo enjabonás y usá productos de baja espuma que requieran menos agua para enjuagar.